ANTROPOSOFÍA, ESENCIA DE LA AGRICULTURA BIODINÁMICA - Julio Arroyo
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3 ماه پیش
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Charla a cargo de Julio
Charla a cargo de Julio Arroyo dentro del marco de la celebración de los 100 años de Agricultura Biodinámica en la finca Torremilanos (Aranda de Duero) organizado por la asociación para la agricultura Biodinámica de España y con la colaboración de la sociedad antroposófica de España.
https://julioarroyogarciaabad.es/
https://biodinamica.es/
https://www.sociedadantroposofica.com/
Respecto a "La Raíz de Luz"
Koberwitz, Pentecostés del año 1924. Al terminar el curso de agricultura biodinámica, Johanna von Kayserlingk, la anfitriona, y Günther Wachsmuth se acercaron a Rudolf Steiner. «Señor profesor, si conseguimos tratar el suelo y nuestras plantas alimenticias según sus instrucciones para revitalizarlos, ¿lo que podemos producir así será un alimento lo suficientemente adecuado para la época y la naturaleza espiritual del ser humano?» La respuesta de Rudolf Steiner fue que «Aun en el mejor de los casos, esto no podrá ser suficiente. Debería hacerse un esfuerzo para hacer autóctona la dioscorea batata en Europa para que ella pueda sustituir a la patata como alimento principal.
[...] Esta planta es la única que es capaz de guardar éter lumínico en sus partes subterráneos, y será imprescindible para la humanidad en el futuro. Crece en China.»
Trascendencia para la alimentación
Como indicó Rudolf Steiner, la dioscorea batata tiene la virtud de guardar éter lumínico, del cual el ser humano actual y futuro tiene necesidad para alimentar su cuerpo etéreo o cuerpo vital.
Rudolf Steiner advierte que en el futuro, eso ya no va ser lo suficientemente posible. Por la cada vez más intensa degradación de la conductividad atmosférica del aire para lo etérico lumínico (debido a los obstáculos y dificultades que cada vez más le oponen a la tierra y sus habitantes lo que se viene denominando contaminación magnética, entre otros motivos), el éter lumínico dejará de estar disponible en cantidades suficientes.
En octubre del año 1924, Wolfgang Wachsmuth, el hermano de Günther Wachsmuth se reunió con Rudolf Steiner para recibir instrucciones más detalladas sobre el cultivo de la planta. Unos años después Wolfgang Wachsmuth consiguió traer dos tubérculos de la dioscorea batata de China. Estos se plantaron en el huerto de investigación agrícola de la Escuela Superior Libre para la Ciencia Espiritual en el Goetheanum. Hasta los comienzos de los años treinta, se hicieron intentos de cultivar la planta, pero a pesar de las altas expectativas, no se hizo progreso.
En los años 50, Adalbert von Kayserlingk se acordó de la planta, de la que le había hablado su madre. Decidió emprender un viaje a Dornach, y encontró unos ejemplares en el jardín del Goetheanum. La dioscorea batata es una planta perenne y resiste las heladas por su capacidad de ir creciendo hacia una gran profundidad. Adalbert von Kayserlingk se llevó las plantas a su domicilio cerca del lago Ammer en Baviera. Siguieron más experimentos e intentos. El problema principal fue que, por su migración en profundidad, la cosecha de la planta era prácticamente imposible.
A principios de los años 90, Ralf Rößner, de profesión encuadernador, pastor y horticultor, se enteró en una conversación con Adalbert von Kayserlingk de la misión de la dioscorea batata, y de ahí tomó la decisión de renovar el impulso de conectar esa planta con Europa Central.
En Pentecostés del año 2002, Ralf Röß ner decidió hacer un viaje a China, a las zonas de cultivo hereditarias. «Allí pude hacerme una idea completa sobre los métodos y condiciones de cultivo. Los tubérculos que encontré allí y llevé conmigo, tenían las mismas cualidades de éter lumínico que las plantas originales de Wolfgang Wachsmuth».
Cultivo biodinámico
Hoy, de las dos raíces que importó Wolfgang Wachsmuth y otras más, se han hecho decenas de miles de plantas en invernaderos, huertos, y en la agricultura. Existe un laboratorio que investiga
la relación entre la raíz de luz y las fuerzas vitales y las condiciones de una alimentación del futuro. También urgió crear una marca protegida, a la que se dio el nombre ‹raíz de luz›. Para los consumidores, la marca es una garantía de que se trata de la raíz de luz con todas sus cualidades únicas, y no de cualquier otra especie de yam.
En un trabajo intensivo de unirse con el ser de la planta, Ralf Rößner vio que el crecimiento en profundidad de esta planta se podía modificar poniendo la raíz en un recipiente colgado o apoyado, encima del suelo.
Cuando el recipiente queda poco menos de un metro encima de la tierra, la raíz de luz, cultivada apropiadamente, puede compenetrar de luz la corporeidad física humana de tal manera que se favorece una orientación hacia el mundo inmaterial o posibilita la misma en una medida necesaria. Ralf Rößner cultiva la raíz de luz en cooperación con empresas de horticultura que siguen los principios de la agricultura biodinámica, necesarios para conseguir que la planta conserve su capacidad de guardar en sí el éter lumínico.
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Respecto a "La Raíz de Luz"
Koberwitz, Pentecostés del año 1924. Al terminar el curso de agricultura biodinámica, Johanna von Kayserlingk, la anfitriona, y Günther Wachsmuth se acercaron a Rudolf Steiner. «Señor profesor, si conseguimos tratar el suelo y nuestras plantas alimenticias según sus instrucciones para revitalizarlos, ¿lo que podemos producir así será un alimento lo suficientemente adecuado para la época y la naturaleza espiritual del ser humano?» La respuesta de Rudolf Steiner fue que «Aun en el mejor de los casos, esto no podrá ser suficiente. Debería hacerse un esfuerzo para hacer autóctona la dioscorea batata en Europa para que ella pueda sustituir a la patata como alimento principal.
[...] Esta planta es la única que es capaz de guardar éter lumínico en sus partes subterráneos, y será imprescindible para la humanidad en el futuro. Crece en China.»
Trascendencia para la alimentación
Como indicó Rudolf Steiner, la dioscorea batata tiene la virtud de guardar éter lumínico, del cual el ser humano actual y futuro tiene necesidad para alimentar su cuerpo etéreo o cuerpo vital.
Rudolf Steiner advierte que en el futuro, eso ya no va ser lo suficientemente posible. Por la cada vez más intensa degradación de la conductividad atmosférica del aire para lo etérico lumínico (debido a los obstáculos y dificultades que cada vez más le oponen a la tierra y sus habitantes lo que se viene denominando contaminación magnética, entre otros motivos), el éter lumínico dejará de estar disponible en cantidades suficientes.
En octubre del año 1924, Wolfgang Wachsmuth, el hermano de Günther Wachsmuth se reunió con Rudolf Steiner para recibir instrucciones más detalladas sobre el cultivo de la planta. Unos años después Wolfgang Wachsmuth consiguió traer dos tubérculos de la dioscorea batata de China. Estos se plantaron en el huerto de investigación agrícola de la Escuela Superior Libre para la Ciencia Espiritual en el Goetheanum. Hasta los comienzos de los años treinta, se hicieron intentos de cultivar la planta, pero a pesar de las altas expectativas, no se hizo progreso.
En los años 50, Adalbert von Kayserlingk se acordó de la planta, de la que le había hablado su madre. Decidió emprender un viaje a Dornach, y encontró unos ejemplares en el jardín del Goetheanum. La dioscorea batata es una planta perenne y resiste las heladas por su capacidad de ir creciendo hacia una gran profundidad. Adalbert von Kayserlingk se llevó las plantas a su domicilio cerca del lago Ammer en Baviera. Siguieron más experimentos e intentos. El problema principal fue que, por su migración en profundidad, la cosecha de la planta era prácticamente imposible.
A principios de los años 90, Ralf Rößner, de profesión encuadernador, pastor y horticultor, se enteró en una conversación con Adalbert von Kayserlingk de la misión de la dioscorea batata, y de ahí tomó la decisión de renovar el impulso de conectar esa planta con Europa Central.
En Pentecostés del año 2002, Ralf Röß ner decidió hacer un viaje a China, a las zonas de cultivo hereditarias. «Allí pude hacerme una idea completa sobre los métodos y condiciones de cultivo. Los tubérculos que encontré allí y llevé conmigo, tenían las mismas cualidades de éter lumínico que las plantas originales de Wolfgang Wachsmuth».
Cultivo biodinámico
Hoy, de las dos raíces que importó Wolfgang Wachsmuth y otras más, se han hecho decenas de miles de plantas en invernaderos, huertos, y en la agricultura. Existe un laboratorio que investiga
la relación entre la raíz de luz y las fuerzas vitales y las condiciones de una alimentación del futuro. También urgió crear una marca protegida, a la que se dio el nombre ‹raíz de luz›. Para los consumidores, la marca es una garantía de que se trata de la raíz de luz con todas sus cualidades únicas, y no de cualquier otra especie de yam.
En un trabajo intensivo de unirse con el ser de la planta, Ralf Rößner vio que el crecimiento en profundidad de esta planta se podía modificar poniendo la raíz en un recipiente colgado o apoyado, encima del suelo.
Cuando el recipiente queda poco menos de un metro encima de la tierra, la raíz de luz, cultivada apropiadamente, puede compenetrar de luz la corporeidad física humana de tal manera que se favorece una orientación hacia el mundo inmaterial o posibilita la misma en una medida necesaria. Ralf Rößner cultiva la raíz de luz en cooperación con empresas de horticultura que siguen los principios de la agricultura biodinámica, necesarios para conseguir que la planta conserve su capacidad de guardar en sí el éter lumínico.
3 ماه پیش
در تاریخ 1403/03/25 منتشر شده
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